Impensable pero real. Inimaginable pero tangible. Así puede describirse el nuevo mundo que experimenta cambios en su entorno y diario vivir.
El confinamiento y la cuarentena que aún experimentan la mayoría de países producto del Covid-19 y coronavirus ha dejado los espacios , los inmuebles y las áreas de oficina , así como a muchas empresas y compañías , en el hospicio. Sus ocupantes han ido a sus casas , a sus hogares y parcelas para huir del fantasma viral y de la pandemia más inverosímil de toda la historia de la humanidad.
Y , en cuatro meses, sumidos en mascarillas , guantes y antibacteriales , al mundo se le ha ido la sonrisa mientras la sociedad ha sido abruptamente distanciada. Sin embargo , en medio de la dura crisis sanitaria que vivimos el ser humano ha sacado a relucir lo mejor de si mismo para competir en esta nueva y fascinante ruta del mundo virtual de la que , airosamente , han salido los organizadores de la cuadragésima sexta versión del festival de música andina de Colombia Mono Núñez.
simbólicamente , Ginebra, sede del festival en el departamento del Valle del Cauca , a pocos kilómetros de la ciudad de Cali , ha quedado ‘sola’ sin sus acostumbrados visitantes de tiples , guitarras , clarinetes , violines compositores y turistas pero , paradógicamente , también ha disfrutado y compartido como nunca antes la versión virtual 2020 , que ha sido el reto más grande de sus organizadores a través de FUNMÚSICA.
Todo esto , gracias a los dispositivos móbiles y a las redes sociales que expandieron el certamen en todas las plataformas digitales.
No obstante y pese al éxito obtenido del Mono Núñes en esta versión virtual , falta mucho por hacer y se requiere que los empresarios , los medios de comunicación y los millones de colombianos que viven fuera del país , se involucren mas en el festival de música andina más importante de latinoamérica.
Así lo revela Bernardo Mejía Tascón , presidente ejecutivo de Funmúsica y el Mono Núñezen diálogo con el editor de EP New York , Francisco Cardona , sobre la historia del festival y los factores que han contribuído al sostenimiento de ésta extraordinaria fiesta de bambucos y pasillos.
Son muchas las inquietudes que aborda el Sr. Mejía Tascón sobre el festival de música andina más tradicional de Colombia que en 46 versiones ha premiado a los mejores intérpretes de bambuco , pasillo , danza , sanjuaneros y guanina y que , adicionalmente , se constituyó en patrimonio cultural del país en el 2003.